Todos los extremos son malos

Podemos decir que en casi todos los campos de la vida los extremos son malos, no hay nada como lograr el punto medio en cada una cada una de las áreas que mas nos interesan, pero podemos decir que pareciera ser también una de las cosas mas difíciles de lograr.

El campo de la educación, puedo decir con absoluta seguridad, después de haber dado clases de meditación en España, cursos de verano en Colombia, practicar el método Reggio Emilia en Miami y dar clases en secundaria y preparatoria en México, que es una de las áreas mas importantes de todas, pues el hecho de ser extremadamente liberales o todo lo contrario absolutamente intransigentes con nuestros hijos, hará de ellos unos seres irrespetuosos, sin valores y responsabilidad alguna  o lo contrario personas con complejos, inseguridad y muy baja autoestima.

Cuál es entonces el termino medio en cuestión de educación para lograr seres humanos amorosos, responsables y seguros de si mismos?

Si nos remitimos a los ejemplos y las estadísticas que suelen hacer muy a menudo las Universidades como Harvard y Yale, pareciera que la mejor formula es y ha sido no darle a nuestros hijos nada gratis sin exigir una valoración por parte de ellos. El caso que plantean estos estudios demuestra que los mejores estudiantes y profesionales han sido en su mayoría chicos sin padres o con pocos recursos los que han logrado grandes éxitos, a base de mucho trabajo y no recibiendo nada gratis. Lo cual les ha hecho valorar lo poco o mucho que han tenido.

Otros buenos ejemplos vienen de padres muy estrictos pero a la vez, muy buenos amigos de sus hijos. Es a veces muy difícil para un padre, marcar donde termina la amistad y empieza el respeto con tus hijos, pero cuando esto se logra resulta ser una combinación maravillosa.

Es por ello muy importante aprovechar hoy en día el hecho de que ya existen "escuelas para padres" en la mayoría de los centros educativos del mundo, e incluso en algunos de ellos ya son obligatorios estos cursos para poder inscribir a los chicos. Muchas veces sabemos o entendemos estos conceptos pero no nos damos cuenta de los errores que estamos cometiendo, hasta que empezamos a tener o ver problemas en nuestros hijos.

La falta de límites en los jóvenes es quizá uno de los mayores problemas de la actualidad, y suele ser porque queremos darle a nuestros hijos todo lo que nosotros no tuvimos o porque queremos compensar la falta de tiempo concediéndoles todo lo que deseen. Esta es una clara muestra de que estamos en un extremo sumamente dañino para el futuro de nuestros hijos. Y la mejor manera de poner solución a tiempo es buscando ayuda profesional. Nada mejor que las escuelas para padres. Las muchas conferencias y platicas dictadas por expertos en el tema. Nunca es tarde para empezar, así tu hijo tenga la edad que tenga!